Tengo un sueño extraño. Me han cortado las piernas,
los brazos, la cabeza, que flotan en el dormitorio. Alguien a mi lado
susurra, se están repartiendo mis miembros Despierto aterrorizado,
envuelto en un sudor frío. Me palpo las extremidades y no las encuentro.
Oigo la voz de mamá, que me llama desde la cocina. Está preparando el
fiambre para el desayuno.